SUMA Inmobiliaria: el arte de vender lujo en La Moraleja
En la Plaza de La Moraleja, donde los pinos centenarios marcan la entrada a un oasis apacible y exclusivo, hay una oficina que no necesita carteles para hacerse notar. SUMA Inmobiliaria lleva más de una década escribiendo, discreta pero firmemente, la historia reciente del lujo residencial en el norte de Madrid.
El despacho no se ve desde la calle. Está en la primera planta de un edificio elegante, justo en la Plaza de La Moraleja. Quien llega hasta aquí lo hace porque ya sabe a dónde va. No hay improvisación. No la hay nunca, en realidad, cuando se trata de comprar —o vender— casas que superan los seis millones de euros.
Sergio Suárez, fundador de SUMA Inmobiliaria, habla con un tono medido. “Aquí no vendemos propiedades, ayudamos a tomar decisiones patrimoniales relevantes”. Su oficina —más parecida a un salón de arte contemporáneo que a una inmobiliaria tradicional— se ha convertido en punto de encuentro de familias internacionales, empresarios discretos y nuevos residentes de alto perfil que buscan refugio en una de las zonas más exclusivas de Europa.
Un mercado donde la discreción vale oro
La Moraleja no es solo una urbanización. Es un ecosistema de privacidad, confort y prestigio, tejido a lo largo de las últimas décadas sobre 950 hectáreas salpicadas de villas con piscina, seguridad 24 horas y jardines que podrían estar en Toscana. A solo 15 minutos del aeropuerto y del distrito financiero, este enclave de Alcobendas ha atraído desde siempre a celebridades, ejecutivos y antiguos miembros de casas reales.
En este contexto, SUMA Inmobiliaria ha construido su reputación con paciencia. “El 60% de nuestras operaciones se cierra fuera del mercado visible”, explica Suárez. El concepto de off-market —viviendas que no se publican en portales ni aparecen en redes— no es una estrategia comercial, sino una promesa de confidencialidad. Y también, un filtro.
De la intuición al dato
Frente a la imagen del agente inmobiliario de corbata ajustada y sonrisa amplia, el equipo de SUMA actúa como un gabinete estratégico. Arquitectos, abogados, fiscalistas… cada compraventa se prepara como si fuera una operación quirúrgica. En este segmento, un error en la presentación de un inmueble puede costar varios cientos de miles de euros.
El mercado no perdona. Según los últimos datos, el precio medio por metro cuadrado en La Moraleja ronda los 5.600 euros, aunque hay propiedades que duplican esa cifra en función de su diseño, ubicación y arquitectura. En 2025, SUMA protagonizó una venta récord: una propiedad de más de 2.300 metros cuadrados que rozó los 20 millones de euros. Fue una operación discreta, gestionada casi en silencio. Como todo lo que ocurre en esta oficina.
Casas que cuentan historias
A diferencia de otras inmobiliarias, SUMA selecciona con mimo cada vivienda. No todas entran en su catálogo. “Hay propiedades técnicamente buenas, pero sin alma”, dice Suárez. En su lista actual hay chalets con bodega climatizada, spa privado, domótica integral y jardines firmados por paisajistas de renombre. Pero también hay pequeños refugios, áticos con terraza y vista al campo de golf, que no buscan epatar, sino ofrecer intimidad y belleza.
Muchos de los compradores ni siquiera viven en España. SUMA ha desarrollado un servicio llave en mano para clientes extranjeros, que incluye desde la reforma y el amueblamiento hasta la gestión de servicios legales y fiscales. La confianza lo es todo. El cliente quiere sentirse acompañado, no perseguido.
Una filosofía que mira al futuro
A lo largo de sus 15 años de historia, SUMA ha demostrado que otra manera de vender inmuebles es posible: con pausa, con criterio, con respeto por el patrimonio. Mientras algunas firmas apuestan por la exposición masiva, ellos siguen creyendo en el poder del uno a uno.
Y lo cierto es que funciona. En un tiempo donde el algoritmo parece marcar cada paso, SUMA Inmobiliaria sigue cultivando una red basada en la recomendación personal y el boca a boca. Un anacronismo, tal vez. Pero uno rentable.
Calle Estafeta 2, portal 1, planta 1, local 3
28109, Alcobendas. Madrid.
Tlf. +34 910 228 309